Al Sur de Alemania, en Baviera, encontramos uno de los castillos más fascinantes e insólitos de Europa, el Castillo de Neuschwanstein, de extraordinaria arquitectura y enclavado en uno de los parajes más bellos de Alemania.

En la Ruta de los Castillos de Alemania, esta es una parada obligatoria que no te puedes perder. En la región de Füsen, el Rey Luis II de Baviera, también conocido como «el rey loco», eligió uno de los parajes más extraordinarios que podamos imaginar para construir entre montañas, valles, lagos y bosques el fabuloso y majestuoso Castillo de Neuschanwstein, una de las maravillas que nos ofrece Alemania y su rico patrimonio.

Quizás las formas de su arquitectura y sus exteriores te suenen de algo. Y es que Walt Disney se inspiró en el Castillo de Neuschanwstein para la película “La Bella Durmiente”. Y qué mejor que un lugar como éste para inspirarse en la fantasía y en el ambiente de ensueño que se respira allí para crear una obra llena de magia.

Baviera y la Región de Füser se encuentran en la frontera con Austria y al norte de la impresionante cordillera de los Alpes Bávaros. En estos parajes de ensueño encontramos el Castillo de Neuschanwstein, uno de los más famosos del mundo y de los más visitados, cuya construcción data de mediados del s.XIX. En él se invirtió una gran parte de las riquezas del país, por orden de Luis II de Baviera, que desde entonces fue conocido como el rey loco. El Castillo de Neuschanwstein posee características que lo diferencian del resto de los castillos de Europa, como las instalaciones de agua corriente por todo el edificio, por ejemplo. Esto se debe a que, aunque es un castillo de apariencia medieval tiene poco más de un siglo, algo también muy característico ya que en esa época predominaban otros estilos arquitectónicos, cosa que lo hace aún más especial.