Benamahoma es una pedanía del pueblo de Grazalema, en Cádiz. Su nombre proviene del árabe y significa «hijos de Mahoma». Está situada a 500 metros sobre el nivel del mar en un entorno privilegiado como es el Parque Natural Sierra de Grazalema, muy conocido por su pinsapar o bosque de pinsapos. Se trata de una especie de abeto casi extinto hoy día y sólo presente en algunos lugares relictos, como es el caso de Grazalema. Un pueblo muy cercano y con mucho encanto también es el Bosque, situado sólo a 5 km. Existe una ruta que une los dos pueblos a través de un hermoso bosque de galería formado por la abundante vegetación.

Es una pedanía muy tranquila, con pocos habitantes, siendo los residentes unos 400. A esto hay que sumar los turistas que acuden a disfrutar de su tranquilidad. Debido a ello, a la afluencia de turistas puede hacer que la población se duplique en vacaciones, Benamahoma tiene una gran oferta de alojamientos rurales.
Hay diversas razones para pasar un fin de semana en Benamahoma. Rincones para visitar hay muchos, por ejemplo, el Manantial de El Nacimiento. Antiguamente proporcionaba agua para talleres de carpintería, molinos, batanes y otros usos tradicionales. En la actualidad, estos usos han sido sustituidos por las diversas picifactorías existentes en la zona.
De este lugar son muy conocidas las «fiestas de Moros y Cristianos», que son las únicas que aún se siguen celebrando en la provincia de Cádiz. Estas fiestas se celebran en honor al patrón de la localidad, San Antonio de Padua.Tienen lugar el primer fin de semana de agosto. En esta celebración se representa una vistosa batalla en la que, no hay que decirlo, los cristianos salen victoriosos. También en honor al patrón se celebra la romería a primeros de junio. Los romeros peregrinan después de la misa hacia Los llanos del Campo, a 2 km del pueblo, donde disfrutan de una tranquila comida campestre.
Otras fiesta es el Toro de Resurrección, el Domingo de Resurrección, donde se corre un toro de cuerda por las calles del pueblo.
Si visitas Benamahoma no te arrepentirás.